Juan Carlos de la Llera: Galardonado investigador asumirá como rector de la UC
Tiempo de lectura: 3 minutos El ingeniero y profesor titular de la casa de estudios fue nombrado como el próximo rector de la UC, quien asumirá el cargo hasta el 2030. En su trayectoria destaca su extensa investigación aplicada al aislamiento sísmico.
La Pontificia Universidad Católica de Chile anunció al ex decano de la Facultad de Ingeniería, Juan Carlos de la Llera como el próximo rector de la casa de estudios, quien llevará el cargo a partir del próximo 18 de marzo, culminando el año 2030 y sucediendo a la actual autoridad, Ignacio Sánchez.
El doctor de la Universidad de California de 63 años es reconocido entre sus pares por su galardonada trayectoria, siendo uno de los profesionales chilenos más premiados a nivel internacional. Su enfoque en el asilamiento sísmico lo destaca en sus investigaciones.
Además de sus aportes a la investigación y desarrollo académico, De la Llera ha desarrollado sistemas que están presentes en diferentes edificios de Santiago, como la torre Titanium, la clínica UC en San Carlos de Apoquindo, el Hospital Militar y el muelle de Coronel. Junto a otras estructuras que cuentan con sus tecnologías en países como Japón, Nueva Zelanda, Grecia, Turquía, Italia y Estados Unidos.
Aportes que le valieron reconocimiento internacional
El académico fue reconocido el año 2011 con el premio «Emprendedor Endeavor» a nivel global. Seguido del premio del premio Avonni Trayectoria Innovadora Anacleto Angelini en 2017, y el Premio Gestión Colegio de Ingenieros en 2022.
El homenaje más reciente y relevante en su carrera llegó el año 2024, cuando la Academia Nacional de Ingeniería de Estados Unidos lo invitó a ser parte de sus miembros, gracias a su trabajo en soluciones e infraestructura para terremotos. Un exclusivo grupo conformado por destacados nombres como Bill Gates y Steve Jobs que hasta la fecha, solo ha incluido a cinco chilenos en sus 60 años de historia.
Una tecnología que podría salvar vidas
Hace un año, en conversación con Cooperativa Ciencia, el ingeniero detalló el aporte que lo llevó hasta la máxima distinción en su disciplina. Pionero en una tecnología que podría mitigar hasta 10 veces los efectos de un terremoto.
Motivado por la falta de técnicas adecuadas para enfrentar los movimientos telúricos, el ingeniero desarrolló el proyecto de aisladores sísmicos que son utilizados en diversas edificaciones y construcciones.
Coincidentemente, el gran terremoto del año 2010 ayudó a validar la investigación que lo llevó a formar parte del selecto grupo en el país norteamericano.
Durante los primeros ensayos, según recordó De la Llera, tuvo que tocar muchas puertas y realizar pruebas para demostrar que la tecnología era confiable.
Tras el positivo resultado y la puesta en marcha de la tecnología, el ingeniero enfatizó en la idea de llevar esta herramienta a todos lados, especialmente a viviendas de bajo costo.
«La técnica no tiene por qué ser utilizada exclusivamente en hospitales o en grandes estructuras, puede también ser utilizada en casas o en viviendas de bajo costo», sostuvo el exdecano.
El valor de los estudiantes
Finalmente, destacó la importancia de la voluntad política para masificar la tecnología y hacerla accesible a todas las personas para proteger sus estructuras, especialmente con lo que significa perder las viviendas a causa del colapso de un terremoto.
Además enfatizó el rol clave que han tenido las y los estudiantes en sus iniciativas: «Quiero resaltar el enorme valor de lo que han sido toda mi vida académica los estudiantes. Todo ha sido hecho con estudiantes de magíster, de pregrado, de doctorado. Todo hecho con el talento enorme de esta gente y por supuesto con la ayuda que yo les podía brindar como su supervisor», declaró el ingeniero.
En esta línea, el profesor destacó otro gran desafío: motivar a los estudiantes por la técnica de protección sísmica, que definió como algo «muy bonito, que salva vidas».
Actualmente, Juan Carlos de la Llera se desempeña también como profesor titular en el Departamento de Ingeniería Estructural y Geotécnica, como investigador del Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres (CIGIDEN) y es socio fundador de SIRVE, compañía dedicada al desarrollo de dispositivos de bajo costo aplicados a construcciones en países sísmicos.