La apuesta chilena para almacenar energía en base a agua y aire
Tiempo de lectura: 2 minutos CHEX es un sistema que utiliza aire comprimido y una cantidad reducida y constante de agua, y puede ser implementado a nivel residencial e industrial, proporcionando energía limpia de forma continua y sin riesgos de suministro. En la imagen una proyección de cómo se vería una planta de este tipo.
En un contexto global marcado por el desafío de transformar la matriz energética y desincentivar el uso de combustibles fósiles, una de las mayores dificultades que presenta el uso de energías renovables es la intermitencia y disponibilidad de sus fuentes, determinada por las condiciones propias del sol, el viento o el agua.
Frente a ello, científicos del Centro Científico Tecnológico de Valparaíso (CCTVal), perteneciente a la Universidad Técnica Federico Santa María, propusieron una solución eficiente, simple y rentable: un sistema de almacenamiento, inspirado en la idea de una represa virtual, capaz de reservar la energía proveniente de fuentes renovables e inyectarla al sistema eléctrico cuando sea necesario.
La empresa CHEX (Compressed Hydro Energy Storage), ofrece una solución sustentable y funciona en base a un proceso cíclico, que utiliza aire comprimido y una cantidad limitada y constante de agua. Mediante la combinación de estanques que contienen estos elementos, el proceso emula la acción de una jeringa: cuando el aire entra al estanque, impulsa el agua hacia una turbina hidráulica de alto caudal, generando así energía eléctrica.
“Hemos escalado esta tecnología a un nivel industrial, confirmando que la prueba de concepto, que se hizo tres años atrás, tenía validez y que el escalamiento es posible. Hablamos de una tecnología simple en cuanto a su diseño e implementación, que utiliza elementos accesibles y no genera residuos químicos. Esto significa que puedes guardar energía al costo más bajo del mercado”, comenta Christian Romero, CEO de CHEX.
Beneficios
A pesar de la simpleza de implementación que tiene el sistema, sus beneficios son significativos: junto con su bajo costo en comparación a las opciones actuales del mercado (aproximadamente 70% más barata en inversiones de largo plazo), se trata de una tecnología con alta eficiencia de conversión eléctrica (>55%), autonomía energética por más de diez horas, escalabilidad de potencia (de 1 MW a 200 MW) y una reducción de la emisión de 300 kg de CO₂ por cada MWh almacenado.
Actualmente, CHEX cuenta con patentes otorgadas en Chile, Argentina y Europa, y diversas firmas e inversionistas han mostrado interés en su escalamiento, como el caso de Amazon, que en 2023 la seleccionó como una de las 33 iniciativas para su programa AWS Clean Energy Accelerator.
Fuente: USM