Consumo de alcohol en Chile llegó a su menor nivel en 30 años
Tiempo de lectura: 3 minutos Además, el consumo de tabaco también experimentó una caída de 1,8 puntos porcentuales respecto al año 2020, según el 15° Estudio Nacional de Drogas en Población General (ENPG) presentado por el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (SENDA).
El ENPG, aplicado bianualmente de forma ininterrumpida desde 1994, es el estudio más importante del país en materia de consumo de drogas y alcohol. Mide declaraciones de consumo, patrones de uso, percepción de riesgo y la disponibilidad de sustancias, entre otros factores.
En específico, esta versión corresponde al primer estudio de vigilancia epidemiológica de SENDA y del Observatorio Chileno de Drogas realizado íntegramente durante un período de desconfinamiento total: noviembre 2022 a mayo 2023.
Uno de los hallazgos más relevantes fue una caída significativa de 5 puntos porcentuales en las declaraciones de consumo de alcohol en el último mes, alcanzando el 39,2%, el nivel más bajo registrado. Este descenso se explica por caídas en ambos sexos y una baja de 14 puntos porcentuales en la población de 19 a 25 años, entre otros factores.
Por su parte, el 17,7% de los encuestados reconoció fumar tabaco al menos 20 días en el último mes (prevalencia diaria de tabaco), lo que representa una baja de 1,8 puntos porcentuales respecto al estudio anterior de 2020.
Otras sustancias
El consumo de marihuana en el último año se mantuvo estable en un 10,9%. Sin embargo, una mirada detenida a la evolución a lo largo del tiempo revela una tendencia a la baja, especialmente evidente desde el pico de 2016.
El uso de cocaína en el último año volvió a los niveles prepandemia, con un 0,9%, mientras que el de pasta base se mantuvo en un 0,3%, una cifra que no ha variado significativamente desde 2010.
Otras sustancias consideradas fueron los tranquilizantes sin receta médica (1,8%), analgésicos sin receta médica (1,5%), alucinógenos (0,9%), éxtasis (0,5%) y estimulantes sin receta médica (0,1%), todos los cuales no experimentaron cambios significativos respecto al estudio anterior.
Aumento de la percepción de riesgo
Otro aspecto destacable del estudio es el incremento en la percepción de riesgo asociado al consumo de alcohol, cocaína, marihuana y pasta base.
La percepción de riesgo del uso experimental de marihuana subió 10 puntos porcentuales, situándose en un 41,8%, el valor más alto desde 2014.
La preocupación por los efectos de beber cinco o más tragos de alcohol aumentó 4 puntos porcentuales respecto a 2020, alcanzando un 89,3%, el nivel más alto registrado hasta la fecha.
Las percepciones asociadas al uso experimental de cocaína y pasta base también experimentaron un aumento significativo, alcanzando el 78,9% y el 87,3% respectivamente, los niveles más altos desde que se tiene registro.
Fuente: SENDA