¿Qué son las tierras raras?: El cotizado mineral que interesa a Estados Unidos
Tiempo de lectura: 2 minutos Estos elementos, cruciales para la fabricación de dispositivos electrónicos y tecnologías de energía limpia, están presentes en los relaves mineros chilenos y otros recursos.
Las tierras raras son un grupo de 17 elementos químicos: escandio, itrio y y los 15 elementos del grupo de los lantánidos. Se caracterizan por sus propiedades únicas, que están en el centro de la innovación tecnológica y energética. Aunque poco conocidas por el público general, son cruciales para la fabricación de dispositivos electrónicos, imanes de alta potencia para turbinas eólicas y vehículos eléctricos.
Las tierras raras comparten características químicas similares, lo que dificulta su separación y procesamiento. A pesar de su nombre, no son tan escasas como se podría pensar; algunos son incluso más abundantes que el oro. Su importancia radica en sus propiedades únicas, que las hacen indispensables en una amplia gama de aplicaciones tecnológicas.
Actualmente, China domina la producción mundial de tierras raras, controlando alrededor del 80% del mercado. Esto explica el creciente interés de otros países, como Estados Unidos sobre estos minerales, ya que buscan diversificar sus fuentes de suministro para garantizar su independencia tecnológica y económica.
El cobre chileno y su potencial asociado a tierras raras
Aunque Chile no posee yacimientos de tierras raras tan ricos como los de China, existen alternativas prometedoras para su extracción. «En Chile tenemos elementos asociados al cobre, por ejemplo, en la gran minería ahí hay elementos de tierra rara», explica Pedro Orrego, académico del Departamento de Ingeniería Metalúrgica de la Universidad de Santiago (USACH).
En concreto, el especialista destaca algunas fuentes de tierras raras, como los relaves mineros. Sin embargo, para que su extracción sea rentable, es necesario desarrollar procesos innovadores y eficientes que reduzcan los costos y maximicen la recuperación de estos valiosos elementos.
«Las concentraciones o las leyes que hay son muy bajas, estamos hablando de 100 gramos en una tonelada, 200 gramos en una tonelada. Entonces eso hace que el proceso sea poco rentable porque hay que tratar mucho material para poder recuperar una pequeña masa», señala Orrego.
«No nos queremos salir del cobre»
A pesar del potencial evidente, Chile aún no ha logrado desarrollar una industria de tierras raras a gran escala, destaca el académico USACH. Esto se debe, en parte, a la fuerte dependencia del país en la minería del cobre, que ha relegado la exploración de otros minerales a un segundo plano.
«Los chilenos somos muy rutinarios, no nos queremos salir del cobre. Cuesta mucho, hay industria del cobre floreciente, somos los primeros del mundo», reflexiona Pedro Orrego, destacando la inercia del sector minero.
