«Pajarear» la avifauna chilena: Consejos para descubrir y conectar con la biodiversidad

«Pajarear» es el acto de observar aves en la naturaleza, una tendencia que cada vez más personas deciden realizar, y donde el uso de la vista y audición cumplen un rol protagónico. El coordinador del programa de educación de la Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile (ROC), Juan Salazar, relata cómo fue su primer acercamiento con esta práctica.

«Yo siempre digo que las aves me fueron a buscar. Llegué a las aves un poquito tarde, ya estaba en la universidad (…). Estaba una mañana aquí en mi casa y llegó un ave a golpear el vidrio insistentemente. Me llamó mucho la atención, yo no tenía idea en ese momento qué era. Lo primero que me suscitó ese encuentro fue la curiosidad de saber qué es esto, qué ave es. Me puse a investigar, me fui interesando cada vez más en este tema. Sin darme cuenta estaba estudiando, saliendo a pajarear, saliendo a observar. Lo asumí como un camino», relató Salazar.

Primeros pasos para ser un pajarero

Ese camino que describe Juan Salazar lo pone en práctica en la ROC, donde constantemente organizan actividades y talleres para que la ciudadanía conecte con la naturaleza, especialmente, con las aves. Uno de los encuentros que suelen organizar son las jornadas de avistamiento de aves, donde entregan recomendaciones básicas a los principiantes que asisten.

Uno de los elementos que suelen emplearse durante la actividad son los binoculares. Salazar explica que hay una variedad de marcas y dispositivos en el mercado, y que cualquiera tiene el potencial para mirar de cerca a las aves. Sin embargo, lo fundamental es cultivar la curiosidad y afinar los sentidos.

Por otro lado, están las guías de campo, que son un material didáctico que ayuda a distinguir las especies. Una de ellas es la aplicación Merlin Bird ID, una aplicación gratuita que permite identificar a cada especie de acuerdo a sus características físicas o su canto. Otra opción para quienes prefieren los recursos en papel, son la guía «Aves de Chile» de Álvaro Jaramillo o «Las aves de Chile: Nueva Guía de Campo» de Daniel Martínez.

¿Dónde pajarear en Chile?

Tal como el dicho, «la práctica hace al maestro», el proceso de pajareo y la experiencia afinan las capacidades para identificar y comparar a cada una. Con la experiencia se puede llegar a diferenciar a las aves a partir de su comportamiento.

Participar de esta observación es más fácil de lo que parece, de hecho, no es necesario atravesar grandes distancias. Para Salazar, observar el entorno es la principal actividad a considerar por quienes quieren iniciarse en el mundo del pajareo.

«(Lo importante es) observar lo que tengo al lado. Muchas veces ir a un parque, una plaza, en nuestros jardines (…). Observar con lo que tenemos cerca. Ese desarrollo cotidiano nos va a permitir después ir dando un paso más allá«, sostuvo el pajarero.

Chile ofrece una diversidad de paisajes ideales para el avistamiento de aves. En la región Metropolitana, el Humedal de Batuco es un excelente punto de partida.

En la región de Valparaíso, la desembocadura del río Maipo y el humedal de Mantagua en Quintero son otros sitios atractivos para conectar con las especies y su hábitat.

En el norte del país, la desembocadura del río Lluta en Arica es un punto rico en diversidad de aves. Otros paraderos destacados incluyen las desembocaduras del Elqui y Choapa. En el sur del país, en tanto, algunas opciones son la zona costera del Biobío, la desembocadura de Rapel y el humedal de Tres Puentes en Magallanes.

Es posible descubrir la riqueza de la avifauna chilena con las salidas de iniciación gratuitas, cursos, charlas y talleres para toda la comunidad que organiza regularmente la ROC, brindando oportunidades para aprender en comunidad y conectar con la naturaleza.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida de ROC (@redobservadores)