Científicos chilenos estudian los efectos del eclipse en el flujo marino

Caleta Tortel, ubicada en la Región de Aysén, fue uno de los lugares privilegiados para observar el eclipse solar anular del 2 de octubre. Mientras la mayoría de las personas disfrutaba del espectáculo astronómico, un equipo de científicos del Centro de Investigación Oceanográfica COPAS Coastal se encontraba desplegado en la zona, aprovechando la oportunidad para estudiar un fenómeno nunca antes investigado: los efectos de un eclipse solar en el flujo marino de un fiordo.

Camila Fernández, directora de COPAS Coastal, explicó que la decisión de estudiar el eclipse fue fortuita. «Planificamos con mucha antelación el terreno, que tenía varias partes. De repente nos enteramos de que iba a haber un eclipse solar y dijimos: Aquí hay una tremenda oportunidad de describir por primera vez este fenómeno desde el fiordo, desde el agua«, comentó Fernández.

El equipo de COPAS Coastal se enfocó en tres áreas de investigación:

• Cambios físicos: Se analizó cómo la disminución de la radiación solar durante el eclipse afectaba la temperatura del agua, la densidad y la turbulencia en la columna de agua del fiordo.

• Gases de efecto invernadero: Se estudió cómo el cambio en la luminosidad influía en la producción de gases de efecto invernadero en el agua, ya que durante la noche las masas de agua tienden a producirlos en lugar de consumirlos.

• Diversidad de microorganismos: Se investigó si la ausencia de luz solar o la alteración en su calidad generaba cambios en la actividad y composición de las comunidades de microorganismos en el fiordo.

Primeras observaciones y futuras investigaciones

Si bien, el análisis de los datos recolectados tomará tiempo, Fernández adelantó algunas observaciones preliminares. «Notamos un descenso en la temperatura de la atmósfera y, aunque la masa de agua se demora más en reaccionar, también se observaron cambios en la turbulencia. La forma en que la luz del eclipse penetra en la columna de agua es muy curiosa y no se comporta como un día común y corriente», señaló.

En cuanto a la diversidad de microorganismos, se encontraron algunos hallazgos interesantes en la superficie del fiordo, a pesar de ser una zona relativamente pobre en ellos. «Este no es un fenómeno que sea asimilable ni a un día ni a una noche, sino que tiene características únicas”, concluyó Fernández.

La investigación realizada durante el eclipse solar en Caleta Tortel abre un nuevo campo de estudio en la oceanografía. Los científicos de COPAS Coastal esperan que este trabajo sea el punto de partida para futuras investigaciones que permitan comprender mejor cómo los eventos astronómicos pueden influir en los ecosistemas marinos. La colaboración con la comunidad de Caleta Tortel, que se mostró muy interesada en el proyecto, fue clave para el éxito de la expedición.

El equipo de COPAS Coastal ya se prepara para el próximo eclipse solar anular que será visible en Chile en 2027, con la esperanza de continuar desentrañando los misterios que se esconden bajo las aguas de los fiordos patagónicos durante estos eventos astronómicos únicos.