Migraña: El dolor que afecta a cerca de 2 millones de personas en Chile
Tiempo de lectura: 2 minutos El neurólogo Alex Espinoza explica las causas, síntomas y tratamientos para esta enfermedad que, si bien no tiene cura, puede ser controlada para mejorar la calidad de vida de los pacientes.
La cefalea, o dolor de cabeza, tiene más de 350 causas identificadas. Entre ellas, se encuentra la migraña, una cefalea primaria que se caracteriza por ser un dolor recurrente e invalidante. Si bien no existen estudios específicos en Chile, se estima que la migraña afecta a un 12% de la población, es decir, cerca de 2 millones de personas.
«Para visualizarlo, sería como llenar el Estadio Nacional 50 o 60 veces con pacientes migrañosos», explica el Dr. Alex Espinoza, neurólogo de la Clínica Las Condes y Red Salud Santiago.
La migraña tiene una fuerte base genética, especialmente por línea materna, y suele manifestarse durante la adolescencia, particularmente en mujeres con la menarquia, el uso de anticonceptivos o el primer embarazo. La proporción de mujeres afectadas es mayor que la de hombres (3 o 4 a 1).
¿Migraña o un dolor de cabeza común?
La migraña se distingue de otros dolores de cabeza por su intensidad y características. Generalmente afecta a la mitad de la cabeza, aunque también puede localizarse detrás del ojo o en la región occipital. El dolor es palpitante, se acompaña de náuseas, vómitos, sensibilidad a la luz y sonidos, y su intensidad varía de moderada a severa.
El origen de la migraña se encuentra en un cerebro hiperexcitable que, ante ciertos estímulos (externos o internos como estrés u hormonales), genera una activación de la corteza cerebral. Esta activación desencadena una reacción en el sistema trigeminovascular, responsable de transmitir la información de dolor al cerebro, provocando la crisis de migraña.
Tratamientos
Aunque la migraña no tiene cura, su pronóstico es benigno. Estudios demuestran que dos tercios de los pacientes ven una disminución de las crisis entre los 60 y 70 años, y en las mujeres, la frecuencia se reduce alrededor de los 50 años.
El tratamiento de la migraña se basa en dos pilares: medidas no farmacológicas y medicamentos.
Las medidas no farmacológicas son fundamentales e incluyen:
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Sueño regular: Dormir entre 7 y 8 horas diarias.
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Alimentación ordenada: Evitar ayunos prolongados y realizar 3 comidas principales con 2 colaciones.
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Hidratación: Consumir 2 a 3 litros de líquido al día.
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Evitar alimentos gatilladores: Quesos, huevos, palta, plátano, chocolate, tomate, alimentos light, cítricos, encurtidos, vino tinto, cerveza, nueces, almendras, soya y maní pueden desencadenar crisis.
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Ejercicio: La actividad física cardiovascular, 3 a 4 veces por semana durante 30-45 minutos, es beneficiosa, pero debe evitarse durante la crisis.
En cuanto a los medicamentos, existen dos tipos:
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Analgésicos: Para tratar las crisis agudas. Es importante evitar la automedicación y consultar con un especialista.
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Tratamiento preventivo: Se administra por un periodo de 3 a 12 meses para reducir la frecuencia de las crisis.
El Dr. Espinoza enfatiza la importancia de consultar con un especialista, especialmente ante la presencia de «banderas rojas» como fiebre, presión arterial muy elevada, taquicardia, dificultad para hablar, caminar o pérdida de fuerza en extremidades.