La vacuna chilena contra el cáncer es posible: ¿Cómo se logra?
Tiempo de lectura: 2 minutos El académico de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, Flavio Salazar, criticó la falta de financiamiento para hacer realidad la vacuna contra el cáncer. «Para fabricarlo en Chile, tenemos que tener acceso a laboratorios de producción acreditados por el Instituto de Salud Pública (ISP) y, en ese sentido, estamos trabajando fuertemente para poder conseguir financiamiento», indicó.
La vacuna chilena contra el cáncer está avanzando a pasos firmes hacia su realización. En conversación con Sin Gravedad, el académico de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile y líder del proyecto, Flavio Salazar, indicó que este ha sido un proyecto que se inició hace más de 20 años.
«Comenzamos con un equipo de médicos del Hospital Clínico de la Universidad de Chile a tratar de transferir el conocimiento que generamos en el laboratorio respecto a la respuesta inmunológica contra el cáncer en algún tipo de terapia que pudiera favorecer a los pacientes», destacó el oncólogo.
El proyecto comenzó con un foco en el cáncer de piel, expandiéndose también al cáncer prostático, donde diseñaron una vacuna llamada TAPcells. Esta «consiste en células del propio paciente que son educadas y luego re inyectadas».
Los resultados de la innovación han sido exitosos. Uno de los más sorprendentes es el aumento de la sobrevida del paciente. «Alrededor de un 40% y un 50% de los pacientes que son tratados, tienen sobrevidas muy largas, de más de 5 años, lo que es realmente extraordinario en términos de esta enfermedad», indicó el asesor de Oncobiomed.
En Chile, la vacuna pasó por estudios clínicos en fase uno y dos. Actualmente, está siendo sometida a ensayo clínico en Brasil. «Estamos tratando de internacionalizar esta tecnología porque, obviamente, se requieren mayores capitales, un acceso a mayor número de pacientes. Chile es una población pequeña, y por eso hemos estado avanzando en Brasil «, explicó Salazar.
Trabas por falta de financiamiento
El oncólogo enfatizó que se requieren fondos adicionales para lograr la aprobación de la vacuna.
«Hemos avanzado en estudios clínicos, pero se genera una nueva necesidad. Esa necesidad requiere plataforma de desarrollo, de producción, que en Chile no tenemos y que sí tienen en Argentina, Brasil, México, pero que nosotros hemos tratado siempre de impulsar. En Chile todavía estamos al debe, pero tampoco son barreras inexpugnables. Se pueden abordar en un periodo corto para poder dar saltos más importantes a la transferencia en biomedicina», aseguró.
¿Cuánto tiempo demoraría en que la vacuna se convierta en una realidad? Según el investigador, «si tuviésemos la inversión necesaria hoy día, planificamos tener una respuesta de éxito en los próximos 3-4 años, porque es lo que demora hacer los estudios clínicos fase tres», destacó.