Monitoreo revela el impacto de la actividad humana en áreas protegidas de Tarapacá
Tiempo de lectura: 2 minutos Un exhaustivo monitoreo con cámaras trampa en el Parque Nacional Volcán Isluga y la Reserva Nacional Pampa del Tamarugal, en Tarapacá, Chile, revela importantes fluctuaciones en las poblaciones de especies nativas como el zorro culpeo y la vicuña.
Con éxito ha concluido el monitoreo 2024 de áreas protegidas de Chile, como el Parque Nacional Volcán Isluga y la Reserva Nacional Pampa del Tamarugal, ubicadas en la región de Tarapacá.
Ambas iniciativas, lideradas por la Corporación Nacional Forestal (CONAF), contemplaron la instalación de cámaras trampa con el objetivo de aportar información sobre las especies nativas que ahí habitan y las amenazas que enfrentan.
En el caso del Parque Nacional Volcán Isluga, el estudio reveló el aumento del zorro culpeo, que pasó de una ocupación del 10 % en 2021 al 29,8 % en 2024, y la disminución del puma, que cayó de un 4 % en 2023 a un 1,8 % en 2024. Por otro lado, la vicuña mostró una leve reducción, con una ocupación del 3,5 % en 2024.
Estas variaciones reflejan dinámicas complejas influenciadas por actividades humanas y cambios ambientales.
El monitoreo también arrojó datos sobre la coexistencia entre fauna silvestre y especies domésticas, lo que plantea retos para la gestión del parque. La alta ocupación de llamas y burros en ciertas áreas sugiere competencia por recursos y posibles impactos negativos en los hábitats nativos. Se documentaron también amenazas significativas en la presencia de burros ferales y perros.
El análisis y sistematización de los datos ha sido posible gracias al software SMART y el trabajo de los guardaparques de CONAF en el territorio. «A través de cada patrullaje se obtiene información estandarizada para la toma de decisiones de gestión de la unidad y tener información útil de los territorios para así generar estrategias de conservación y protección de la biodiversidad que estamos mandatados a preservar», destaca la directora regional, Natalia Ortega.
Reserva Nacional Pampa del Tamarugal
En el caso de la Reserva Nacional Pampa del Tamarugal, el monitoreo 2024 abarcó 60 puntos estratégicos en la reserva, con cámaras trampa operativas durante 107 días.
Se obtuvieron más de 6,600 imágenes, permitiendo identificar 8 especies, incluyendo al zorro culpeo, el tuco tuco del Tamarugal y el corredor de Pica. Sin embargo, especies domésticas como cabras y ovejas dominaron el registro, representando el 45.2 % y 21.7 % de la abundancia relativa, respectivamente.
El sector Refresco destacó como un punto crítico de biodiversidad, albergando la mayor riqueza de especies gracias a su variada cobertura de tamarugos. No obstante, este sector también enfrenta una alta presión de la ganadería, que afecta negativamente la regeneración del tamarugo y las dinámicas de la fauna silvestre.
SMART desde Tarapacá a la Patagonia
La Corporación Nacional Forestal (CONAF) ha dado un paso decisivo hacia la modernización de la gestión de las áreas protegidas en Chile con la implementación del software SMART (Spatial Monitoring and Reporting Tool).
Desde su inicio en 2019, donde el Parque Nacional Volcán Isluga fue la experiencia piloto a nivel nacional, esta herramienta ha revolucionado la forma en que se monitorean y gestionan las amenazas a la biodiversidad.
En estos cinco años SMART se ha expandido a 26 unidades más en 10 regiones administrativas, cubriendo desde ecosistemas marinos en la Patagonia hasta el Altiplano en el extremo norte del país. Este esfuerzo ha permitido a los guardaparques no sólo identificar amenazas como la extracción ilegal de recursos y el uso no regulado del fuego, sino también registrar especies clave como el huemul, el pingüino de Humboldt, la vicuña, flamencos entre otros para luego utilizar esta información en la gestión y administración de las áreas protegidas.