Estudiante de doctorado lidera descubrimiento clave para entender la formación planetaria

Tiempo de lectura: 2 minutos Un equipo internacional encabezado por Aurora Aguayo utilizó el radiotelescopio ALMA en Atacama para confirmar una estructura nunca antes vista alrededor de la estrella MP Mus.
Un significativo avance en la comprensión de la formación de planetas ha sido logrado por un equipo internacional de astrónomos, liderado por la estudiante chilena de doctorado en Astrofísica del Instituto de Física y Astronomía (IFA) de la Universidad de Valparaíso, Aurora Aguayo.
Utilizando la potencia del Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), ubicado en el desierto de Atacama, el equipo confirmó la existencia de un anillo de polvo previamente no detectado alrededor de una joven estrella cercana.
El hallazgo, que será publicado próximamente en la prestigiosa revista científica Astronomy & Astrophysics, contó con la colaboración de especialistas de Chile, Europa y Estados Unidos, y fue supervisado por los astrónomos Dr. Zhen Guo (IFA-UV) y Dr. Claudio Cáceres (Universidad Andrés Bello).
Este descubrimiento no solo valida la capacidad de los instrumentos como ALMA para escudriñar los detalles más finos del cosmos, sino que también posiciona a jóvenes investigadores chilenos en la vanguardia de la astronomía mundial.
ALMA en Atacama: Ventana hacia la formación planetaria temprana
El objeto de estudio fue el sistema MP Mus (también conocido como PDS 66), una estrella en etapa pre-secuencia principal ubicada a unos 300 años luz de la Tierra. Este sistema es particularmente interesante por albergar uno de los discos protoplanetarios –estructuras de gas y polvo donde nacen los planetas– más cercanos a nuestro propio Sistema Solar.
Imágenes anteriores en el infrarrojo cercano ya sugerían la presencia de estructuras complejas dentro del disco, pero las observaciones en longitudes de onda milimétricas, cruciales para estudiar el polvo frío que compone estos anillos, no habían logrado confirmar su existencia hasta ahora.
La clave residió en las nuevas observaciones de alta resolución obtenidas por ALMA en la Banda 7 (a una longitud de onda de 0.89 mm). Aurora Aguayo aplicó herramientas computacionales avanzadas para procesar los datos y logró aislar una sutil pero definida estructura anular en el disco de MP Mus. Este anillo se encuentra a aproximadamente 50 unidades astronómicas (au) –unas 50 veces la distancia entre la Tierra y el Sol– del centro de la estrella.
«Fue la primera vez que lideré un análisis observacional sobre un objetivo tan destacado. El momento en que vimos emerger esa débil estructura de anillo desde el ruido fue inolvidable. Se sintió como abrir una pequeña ventana a las primeras etapas de la formación de sistemas planetarios», relató emocionada Aguayo.
Implicancias para la formación de planetas
Más allá de la simple detección de la imagen del anillo, el equipo analizó el índice espectral del disco. Este parámetro es fundamental para inferir el tamaño de los granos de polvo presentes.
Los resultados mostraron un gradiente en este índice, lo cual es compatible con procesos físicos clave en la evolución de los discos protoplanetarios: el movimiento de arrastre radial (donde las partículas de polvo migran hacia la estrella) y el crecimiento de estos granos. Estos mecanismos son pasos esenciales en la «construcción» de planetesimales, los bloques fundamentales que eventualmente forman planetas.
«El trabajo de Aurora demuestra cuánto hemos avanzado en nuestra capacidad para leer los detalles finos de las estructuras de los discos», comentó el Dr. Zhen Guo, uno de los supervisores del estudio. «Este descubrimiento no solo mejora nuestra comprensión del sistema MP Mus, sino que también contribuye a refinar nuestros modelos de evolución de discos en general«, agregó.
La extraordinaria sensibilidad y resolución de ALMA, el observatorio terrestre más potente del mundo operando desde el llano de Chajnantor en Chile, fue indispensable para este logro.