En vivo 🟠 SEÑAL ONLINE

Astronómos piden término anticipado del proceso de evaluación ambiental del proyecto INNA

Astronómos piden término anticipado del proceso de evaluación ambiental del proyecto INNA

  -

Tiempo de lectura: 4 minutos La Seremi de Medio Ambiente de Antofagasta presentó al SEA un informe que evidencia falencias en el Estudio de Impacto Ambiental presentado por AES Andes para la evaluación del proyecto INNA. La Sociedad Chilena de Astronomía ahora busca el término anticipado del proceso, que advierten podría afectar a los cielos más prístinos del mundo.

Comparte:

El Ministerio del Medio Ambiente entregó al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) sus observaciones sobre el proyecto INNA de Aes Andes que busca instalar un complejo industrial de producción de hidrógeno y amoníaco verde.

El proyecto, que se encuentra en su primera etapa de evaluación ambiental, ha recibido críticas por parte de la comunidad astronómica nacional e internacional, a las que incluso se sumaron varios premios nacionales y el Consejo de Rectores y Rectoras de Chile, advirtiendo graves perjuicios para centros astronómicos de relevancia mundial, instalados en la región de Antofagasta.

En detalle, el mayor impacto que adelantan astrónomas y astrónomos sería para el Observatorio Paranal del Observatorio Europeo Austral (ESO), que hoy alberga el Very Large Telescope (VLT) y donde se construye el Extremely Large Telescope (ELT), el futuro telescopio más grande del mundo que operará desde Chile.

Los argumentos del Ministerio

En esa línea, el documento presentado por el seremi de Medio Ambiente de Antofagasta establece reparos e indicaciones al proyecto INNA que apuntan a la ubicación del proyecto, la contaminación lumínica que puede afectar a áreas astronómicas, la distancia con los observatorios, además del impacto en flora y fauna local.

El primer punto que advierte el Ministerio sobre el Estudio de Evaluación Ambiental presentado por Aes Andes es que la ubicación del proyecto no se encuentra dentro de los polígonos establecidos para esos fines.

«El titular señala entre las características para la justificación de la ubicación del proyecto, los polos de desarrollo de generación eléctrica (PDGE), proceso sometido a evaluación ambiental estratégica, como herramienta para la validación de instrumentos de planificación territorial que consolida información georeferenciada actualizada de las componentes ambientales, para maximizar la sustentabilidad del territorio», se lee en el documento.

Y advierte: «De la revisión de los polígonos resultantes, se observa que el proyecto en evaluación no se encuentra inserto en ninguno de los polígonos definidos por PDGE para la provincia de Antofagasta; por lo que el proyecto no tiene relación directa con PDGE como instrumento evaluado estratégicamente ni con la sustentabilidad del territorio.»

Proyecto INNA en rojo; PDGE en amarillo.

Contaminación Lumínica

El documento también aborda el impacto de la contaminación lumínica en una zona de interés astronómico: «No se encuentra suficientemente descrita ni fundamentada, y además se aprecia que esta ha sido subestimada, toda vez que no ha considerado el escenario más desfavorable, particularmente en lo que respecta al brillo del cielo en sitios astronómicos sensibles.»

En esa línea, el oficio recuerda que el proyecto se ubica dentro de un área con valor científico y de investigación para la observación astronómica y que dentro de dicha área se ubican sitios astronómicos con condiciones de observación únicas a nivel nacional e internacional, cuyo brillo del cielo ha sido ampliamente caracterizado a nivel científico.

Por lo mismo, solicita «rectificar la determinación y justificación del área de influencia».

El proyecto astronómico omitido

En su Estudio de Impacto Ambiental, la empresa argumenta que el proyecto se ubica a aproximadamente 30 kilómetros de los observatorios Paranal y Armazones, lo que, según su criterio, los dejaría fuera del área de influencia del proyecto.

Sin embargo, la Seremi cuestiona la forma en que AES Andes delimitó ese punto, omitiendo impactos críticos sobre los observatorios cercanos, particularmente la futura instalación del Cherenkov Telescope Array (CTA), un tercer telescopio que se vería seriamente comprometido, tal como lo reveló Cooperativa Ciencia. 

«Se hace presente en la evaluación que se ha omitido el Sitio Astronómico Cherenkov Telescope Array, ubicado a unos 4 km del Proyecto. Este observatorio, si bien comienza su construcción el año 2025, está planificado desde el año 2018, y comenzará sus operaciones científicas el año 2026″, subraya el documento.

Comunidad astronómica pide término anticipado

Con lo anterior y a solo horas que el SEA entregue su informe sobre el futuro del proyecto INNA, desde la Sociedad Chilena de Astronomía solicitan el término anticipado de este proceso.

Las y los astrónomos agregan: «Reiteramos nuestra convicción que el uso ordenado del territorio nacional puede permitir que la producción de energía y la astronomía puedan coexistir y ambas aportar al desarrollo de Chile. Atendidas las observaciones hechas por el MMA, el proyecto INNA, tal como ha sido presentado, sería técnicamente inviable y adolecería de imprecisiones y carencias graves que ameritan el término anticipado de su estudio de impacto ambiental.»

Por su parte, la astrónoma y Premio Nacional de Ciencias Exactas 1997, María Teresa Ruiz, en una carta a El Mercurio, calificó el informe del Ministerio de Medio Ambiente como “lapidario” para el proyecto INNA.

“Este informe es lapidario para dicho proyecto: documenta una evaluación inadecuada de su impacto lumínico, una subestimación de su área de influencia, así como un error grueso en la ubicación que propone, además de otras falencias. Lo anterior constituye un conjunto de fallas esenciales de dicho proyecto que lo hacen inviable”, señaló.

La experta coincide con la postura de Sochias, argumentando que «lo más sensato sería un rechazo temprano (dentro del plazo que vence este lunes 24 de febrero) en el proceso de evaluación ambiental, lo que tendría el efecto adicional de restaurar la credibilidad del Estado de Chile como anfitrión de grandes observatorios astronómicos.


Te puede interesar