La música clásica puede calmar la frecuencia cardíaca y ayudar al desarrollo fetal
Tiempo de lectura: 2 minutos El análisis contempló 36 casos de mujeres entre 32 y 40 semanas de embarazo. Los investigadores destacaron que la variabilidad de la frecuencia cardíaca puede proporcionar información sobre la maduración del sistema autónomo del feto.
Un estudio publicado en la revista Chaos concluyó que la música clásica puede calmar el ritmo cardíaco de los fetos en gestación. Los investigadores registraron la frecuencia cardíaca fetal en 36 embarazadas que escucharon ‘El cisne’, del francés Camille Saint-Saëns, y ‘Arpa de Oro’, del mexicano Abundio Martínez.
La medición fue realizada por investigadores de la Universidad Autónoma del Estado de México, la Universidad Autónoma Metropolitana, el Hospital General Nicolás San Juan y el Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez, quienes sugieren que la música clásica ayudaría a promover el desarrollo fetal.
“La exposición a la música daba lugar a patrones de frecuencia cardíaca fetal más estables y predecibles”, señaló una de las investigadoras del Departamento de Biología Molecular del Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez, Claudia Lerma.
¿Cómo lo descubrieron?
El equipo de científicos estudió la frecuencia cardíaca en fetos entre 32 y 40 semanas de gestación mediante el análisis de cuantificación de recurrencia (RQA). En principio, los resultados revelaron patrones más regulares y predecibles.
Para recopilar los datos, utilizaron el monitor materno-fetal «Mónica AN24» con una frecuencia de muestreo de 900Hz. El dispositivo cuenta con tres cables de canal bipolar separado, los cuales se unen en un cable común y producen tres canales eléctricos separados. Luego colocaron estratégicamente cinco electrodos alrededor del abdomen de las embarazadas.
El estudio subrayó el potencial de la música clásica para «mejorar la predictibilidad y estabilidad de la dinámica cardíaca fetal, lo que ofrece nuevos conocimientos sobre el efecto de la música en el cuidado perinatal».
Un posible factor cultural
Los investigadores sugieren que la música clásica podría ayudar a promover el desarrollo fetal, resume la revista.
Además, los cambios en la dinámica de la frecuencia cardíaca fetal se producen instantáneamente en fluctuaciones a corto plazo, por lo que los padres podrían plantearse exponer a sus fetos a música tranquila, en palabras de Alonso Abarca-Castro, otro de los firmantes.
El equipo también estudió las diferencias entre las dos piezas clásicas y aunque ambas eran eficaces, vieron que la melodía de la guitarra mexicana tenía un efecto mayor.
‘Arpa de oro’ parecía tener un impacto más fuerte en algunas medidas, indicando que producía patrones de frecuencia cardíaca que eran más predecibles y regulares”, explicó Abarca-Castro.
Por lo anterior, el investigador consideró que factores como las características rítmicas, la estructura melódica o la familiaridad cultural pueden estar relacionados con esta diferenciación.
El equipo tiene previsto seguir estudiando este efecto con distintos géneros y tipos de música y una muestra mayor de personas.