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Musgos ayudarían a mitigar el cambio climático

Musgos ayudarían a mitigar el cambio climático

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Tiempo de lectura: 3 minutos Así lo determinó un estudio internacional que contó con la participación de científicos chilenos de la Universidad Mayor, quienes analizaron suelos de áreas urbanas y naturales de distintos lugares del país. «Una forma de amortiguar los efectos del cambio climático es generar más áreas verdes en ambientes urbanos para que los musgos cubran suelos y árboles», advierte uno de los investigadores.

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Podemos encontrarlos en sectores con alta vegetación, como parques o cerros. Pueden ser de color verde, marrón e incluso negro y, habitualmente, recubren el suelo o las rocas. Hablamos de los musgos, una variedad de planta que, hasta ahora, poco se sabía de su importancia ecológica. Es que un reciente estudio global, publicado en la revista Nature Geoscience, reveló el rol de esta especie en la mitigación del cambio climático.

Investigadores de distintas partes del mundo recolectaron muestras de suelos cubiertos por musgos en áreas verdes urbanas y desde áreas naturales menos intervenidas. En representación de Chile, los académicos del Centro GEMA – Genómica, Ecología y Medio Ambiente de la Universidad Mayor, Fernando Alfaro y Sebastián Abades, analizaron suelos de Santiago (área urbana) y Curacaví (área natural), con el objetivo de comparar si los beneficios asociados a la presencia de este grupo de plantas eran evidentes en zonas urbanas o zonas más naturales.

Según Alfaro, los musgos son organismos tolerantes a condiciones extremas y podemos encontrarlos en distintos lugares de la capital, como los cerros San Cristóbal, Santa Lucía y senderos montañosos. «La mayoría de las áreas sin vegetación están cubiertas por musgos. Ocupan espacios que, por lo general, no están cubiertos por otro tipo de plantas, por lo tanto hacen una cobertura vegetal del suelo«, explica el investigador.

Musgo. Fotografía de Fernando Alfaro

Regulan el flujo hídrico

Es, precisamente, esta característica de los musgos la que les permite enfrentar la escasez hídrica y regular el ciclo hídrico en ambientes urbanos: «Un problema que tenemos ahora en el centro de Chile es la disponibilidad de agua. Si hay un suelo sin vegetación y llueve, esa agua se va a evaporar muy rápido y va a penetrar poco en el suelo. En cambio, si tienes una cobertura vegetal como los musgos el agua se va a retener por mucho más tiempo, entonces el agua es usada de manera más eficiente«.

Además, el académico explica que los musgos tienen un rol como estabilizadores del suelo: «Cuando ocurren lluvias muy intensas, hacen que el suelo no se erosione. Funcionan como unas esponjas que van regulando cuánta agua va permeando el suelo y evitan que ese suelo escurra con la lluvia».

Musgo. Fotografía de Fernando Alfaro

El hogar de microorganismos

Otra de las funciones de los musgos es que son el hábitat de una variedad de microorganismos esenciales en el reciclaje de nutrientes: «Cuando llega el otoño y las hojas caen sobre el musgo, el proceso natural es que se vayan descomponiendo para liberar nutrientes que la planta nuevamente pueda utilizar. Quienes descomponen estas hojas son distintos organismos, como hongos y bacterias, que se refugian en los musgos«, advierte Alfaro.

Asimismo, los musgos también se encargan de fijar el CO2. Alfaro detalla que «en un ambiente tan contaminado como el nuestro esta función es súper importante».

Musgos en hábitat natural. Fotografía de Fernando Alfaro

El llamado a proteger especies de suelo

Para Alfaro, la presencia de los musgos en ambientes urbanos tiene un rol crítico para mitigar el cambio climático. En ese sentido, el científico advierte que el estudio «hace un llamado a no solo centrarse en especies forestales, ya que hay muchos organismos en el suelo que tienen funciones vitales para mantener el desarrollo de los ecosistemas urbanos».

El problema, alerta el investigador, es que la cobertura de los musgos «ha ido disminuyendo considerablemente en ambientes urbanos«, ya que han sido reemplazados por especies introducidas, como el pasto, que son muy costosas en términos medioambientales.

«El pasto requiere de cuidados especiales, como regarlo, por lo tanto hay un tema con el uso poco controlado del agua para mantener estas áreas verdes. En cambio, los musgos, al ser especies nativas, no necesitan estos cuidados y cumplen más funciones«, señala Alfaro.

El científico destaca que este tipo de investigaciones revelan la importancia de las áreas verdes con especies nativas en zonas urbanas: «Una forma de amortiguar los efectos del cambio climático es generar más áreas verdes en ambientes urbanos, para que los musgos sean capaces de cubrir suelos y árboles».


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