Dulcibella camanchaca: El nuevo depredador oceánico de Fosa de Atacama
Tiempo de lectura: 3 minutos Se trata del primer anfípodo depredador y de gran tamaño que es descubierto en las profundidades de la Fosa de Atacama. El hallazgo frente a las costas de la región de Antofagasta, permite comenzar a descifrar las relaciones ecológicas que existen en las comunidades que habitan un ambiente tan extremo y remoto.
El hallazgo ha sido publicado en la revista científica Systematics and Biodiversity. Se trata de un trabajo colaborativo entre científicos del Instituto Milenio de Oceanografía (IMO), de la Universidad de Concepción (UdeC), Chile, e investigadores de la Institución Oceanográfica de Woods Hole (WHOI, por su sigla en inglés) de Estados Unidos.
La nueva especie descrita habita en la denominada zona “hadal”, la región más profunda del océano, que se extiende desde los 6.000 hasta los 11.000 metros de profundidad. Este entorno extremo se caracteriza por la ausencia total de luz, temperaturas cercanas al punto de congelación y una presión hidrostática extremadamente alta.
Una especie única
A primera vista, estas condiciones parecerían imposibilitar la existencia de vida, pero los recientes descubrimientos realizados por investigadores del IMO confirman lo contrario: en estas profundidades habitan organismos únicos, adaptados específicamente para sobrevivir en uno de los ambientes más hostiles de nuestro planeta.
“Con el nombre Dulcibella camanchaca, se rinde homenaje a Dulcinea del Toboso, personaje de Don Quijote de la Mancha de Cervantes, símbolo del amor idealizado y fuente de inspiración para el amor, la valentía y la fe del protagonista. Sin embargo, dado que el nombre «Dulcinea» ya había sido asignado en 1907 a un género de insectos, se optó por el nombre Dulcibella, el cual aparece en la poesía inglesa medieval como un modelo de mujer amada o idealizada”, explica la coautora de la publicación científica e investigadora postdoctoral del Instituto Milenio de Oceanografía, Dra. Carolina González.
El académico del Departamento de Oceanografía de la Universidad de Concepción y Director del Instituto Milenio de Oceanografía, Osvaldo Ulloa, valoró este nuevo avance en investigación. «Hace una década nos propusimos explorar la Fosa de Atacama, y hoy estamos realizando descubrimientos de relevancia mundial. Desde Concepción, estamos posicionando a nuestro país en la vanguardia de la exploración y la investigación oceánica, un esfuerzo que debemos seguir fortaleciendo y proyectando hacia el futuro», aseguró.
¿Cómo es Dulcibella camanchaca?
Dulcibella camanchaca es un depredador de rápido movimiento, con casi cuatro centímetros de longitud. Este crustáceo usa mandíbulas y apéndices raptoriales especializados para capturar y alimentarse de otras especies como anfípodos más pequeños en el ambiente de la Fosa de Atacama (Perú-Chile), limitada en alimentos.
“Aún más emocionante, es que los datos de ADN y morfología nos indican que esta especie representa también un nuevo género, subrayando a la Fosa de Atacama como un punto de alto endemismo”, recalca la otra coautora principal del estudio y ecóloga hadal de WHOI, Dra. Johanna Weston.
¿Pero qué significa el descubrimiento de un nuevo género para la ciencia? Se trata de un hallazgo trascendental, ya que las diferencias con otros anfípodos depredadores de otras fosas es tal que dentro de este nuevo género Dulcibella a futuro podrán ser descubiertas nuevas especies. Además, la mayoría de los anfípodos hadales, como el gigante Eurythenes atacamensis, descubierto también recientemente en la Fosa de Atacama, son carroñeros, es decir se alimentan de animales muertos que llegan al fondo. Dulcibella camanchaca, sin embargo, en una cazadora activa y de la cual no se tenía registro.
Expediciones que generan descubrimientos trascendentales
Este hallazgo forma parte de los resultados de la expedición asociada al Sistema Integrado de Observación del Océano Profundo (IDOOS, por su sigla en inglés) de 2023 a bordo del buque de investigación chileno Abate Molina —operado por el Instituto de Fomento Pesquero— liderada por científicos del IMO y con la colaboración del Centro de Instrumentación Oceanográfica (CIO), ambos centros de la Universidad de Concepción.
En este crucero de investigación, se recolectaron cuatro individuos de Dulcibella camanchaca a una profundidad de 7.902 metros usando un vehículo de aterrizaje autónomo, una plataforma no tripulada que transporta instrumental científico, incluyendo trampas con cebo, hacia el fondo marino y de regreso a la superficie. Una vez a bordo, los anfípodos recuperados fueron congelados y luego sometidos a un análisis morfológico y genético detallado en la Universidad de Concepción.
Cabe destacar que hace menos de un mes, científicos del IMO llevaron a cabo la Expedición Oceanográfica IDOOS II, en la que recuperaron exitosamente diversos tipos de instrumental y sensores, que se mantuvieron durante un año registrando datos en las profundidades de la Fosa de Atacama.
Esta reciente expedición también incluyó la recolección de muestras y posiblemente de nuevas especies, que tendrán que ser analizadas en detalle por los científicos, quienes a futuro podrían seguir sorprendiendo al mundo con nuevos y revolucionarios hallazgos del océano profundo.