Psicología y astronomía: ¿Cómo afecta el espacio a la mente de los astronautas?
Tiempo de lectura: 2 minutos ¿Cómo puede afectar a la mente habitar en ambientes y condiciones extremas? Esto es lo que estudia la psicología del espacio y que, en el último tiempo, ha dirigido su atención a las labores astronómicas. El neurocientífico Francisco Parada explica los cambios que puede tener el cerebro de los astronautas.
La psicología tiene distintas áreas, algunas más conocidas que otras, pero, sin duda, una de las que parece estar desarrollándose con fuerza es la psicología espacial. Es decir, aquella rama enfocada en estudiar cómo los ambientes que habitan las personas influyen en sus pensamientos y comportamientos.
En conversación con Todo Tiene su Ciencia, el académico de la Universidad Diego Portales y director del Centro de Estudios en Neurociencia Humana y Neuropsicología, Francisco Parada, llevó este tema a un ámbito extremo, en donde las personas deben tomar decisiones en un contexto de alto estrés: el ámbito astronómico.
«La evidencia muestra que estar sentado mucho rato genera problemas en la salud. Estar pegado con una luz que no es natural también genera problemas relacionados a enfermedades que no son de transmisión. Estamos hablando de enfermedades cardiovasculares. Los astronautas también sufren de eso, pero, obviamente, en otro contexto y ahí viene la pregunta: ¿La microgravedad le afecta a la gente que está en la Estación Espacial Internacional?», mencionó el psicólogo.
Trabajar en condiciones extremas
La carrera espacial se acentúa cada vez más y eso también desafía las capacidades humanas. Frank Rubio fue un ejemplo de eso al convertirse en el astronauta de la NASA que más tiempo ha pasado en el espacio, llegando a permanecer 371 días al interior de una nave espacial.
¿Qué es lo que se conoce sobre los efectos del espacio en el organismo? Parada se refirió a estudios que apuntan a que las frecuencias cerebrales, observadas en encefalogramas, disminuyen y se ven afectadas. «Hay algunos cambios que son súper evidentes en alfa, en beta y también el potencial evocado. Obviamente, ese tipo de estudios está recién partiendo. Hay que estandarizar los dos o tres grupos. Parece que la microgravedad algo afecta y todavía está la pregunta abierta», señaló el académico UDP.