Precipitaciones disminuirían hasta un 40% en Chile central
Tiempo de lectura: 3 minutos Una reciente investigación pronosticó un incremento de hasta 5 grados de temperatura en esta zona del país hacia fin de este siglo. La investigación fue realizada gracias a un trabajo colaborativo que utilizó 36 modelos climáticos globales en todo Chile.
Sabemos que el cambio climático está generando consecuencias negativas en diferentes territorios, y que en todo el mundo se discuten estrategias para frenar el aumento global de la temperatura. Si bien el panorama es complejo, ¿es posible saber qué futuros se proyectan en relación a los cambios en las lluvias y temperaturas en Chile?
Un reciente estudio, liderado por Álvaro Salazar, investigador del Instituto de Ecología y Biodiversidad, IEB, y de la Universidad de La Serena, busca acercarse de manera más precisa a estos escenarios. Para ello, realizó una división de nuestro país en cuatro zonas: Chile norte, Chile central, Patagonia norte y Patagonia sur.
Según los resultados, en esas cuatro zonas la totalidad de los modelos están de acuerdo con que la temperatura va a aumentar.
En el caso de las precipitaciones, el panorama varía entre uno y otro modelo. Algunos predicen un aumento y otros una disminución para el futuro. “Esto varía significativamente en las zonas donde hay pocas estaciones meteorológicas, como el Desierto de Atacama y la Región de Magallanes”, señala el Salazar.
40% menos de lluvias
El trabajo también indica que Chile central ya es un “hotspot” de cambio climático a nivel mundial, donde los efectos de este fenómeno -como los drásticos cambios en las precipitaciones- son explícitos en el presente y se mantendrían hacia fines del siglo XXI.
“El 90% de los modelos concuerda en que habrá una disminución de las precipitaciones en Chile central y se pronostica que esta merma en las lluvias podría ser de hasta un 40%. A esto se suma un 100% de acuerdo en el aumento de la temperatura, que alcanzaría hasta 5°C más, especialmente en el área de la Cordillera de los Andes”, afirma el científico del IEB.
De esta manera, una menor cantidad de precipitaciones y un aumento significativo de la temperatura, “haría que la crisis hídrica que estamos viviendo ahora se incremente mucho más según los modelos”.
Álvaro Salazar también pronostica una disminución de la precipitación que cae en forma de nieve, para Los Andes de Chile central, “lo que provocaría un mayor número de eventos de inundación, un menor almacenamiento de agua como nieve, y una disminución de la masa de glaciares. Todos estos eventos combinados afectarían fuertemente la disponibilidad de agua para ciudades, industria y ecosistemas”, enfatiza.
¿Qué pasaría en las otras zonas?
Para la zona norte no hay acuerdo de los modelos en relación a la precipitación. Sin embargo, todos pronostican un fuerte aumento en la temperatura. A nivel nacional la zona norte es la que proyecta un mayor calentamiento de hasta 6°C, especialmente en el altiplano, zona de alto valor productivo por el cobre y litio, y donde se insertan comunidades indígenas.
También se pronostica un aumento de la temperatura en Patagonia Sur, lo que puede afectar el derretimiento de glaciares.
En relación al clima pasado o reciente, la principal conclusión es que para el extremo norte y extremo sur de Chile, las observaciones de precipitación difieren mucho entre ellas, razón por la cual “es necesario reforzar el sistema de monitoreo de estaciones meteorológicas para estas zonas de geografía compleja y sub estudiadas”, de acuerdo al científico.
El investigador menciona que si bien este estudio disminuye la incertidumbre respecto al cambio climático futuro en estas zonas, también deja cabos sueltos, pues los modelos no son exactos y presentan una variedad de fuentes de incertidumbre. Por otro lado, Salazar también da cuenta del escaso número de estaciones meteorológicas en Chile, falencia que debe ser abordada a nivel país.
El trabajo analizó 36 modelos climáticos globales, contenidos en CMIP6 (Coupled Model Intercomparison Project), un proyecto internacional de aproximadamente 30 institutos de investigación coordinados para el desarrollo de modelos que representan los procesos climáticos presentes y futuros. El grupo de también estuvo integrado por Francisco Squeo y Julio Gutiérrez, ambos investigadores del IEB y de la Universidad de La Serena.
Fuente: IEB y U. de La Serena