Científicos aplican métodos observación experimental a volcanes
Chile tiene alrededor de 90 volcanes activos, algunos de los cuales han tenido históricas erupciones, por ejemplo, los volcanes Villarrica y Chaitén. Debido a esto es necesario desarrollar e instalar sistemas de monitoreo volcánicos que ayuden a prevenir desastres mayores.
Actualmente, organismos como el Sistema Nacional de Vigilancia Volcánica y con el Servicio Nacional de Minería y Geología se encargan de monitorear volcanes que hayan hecho erupción en los últimos 500 años, tales como el volcán Villarrica, Llaima, Chaitén, Cordón Caulle y Láscar.
De este modo, con los datos recopilados, buscan prever la erupción de estos y desarrollar protocolos de evacuación en las diferentes comunidades.
Ahora, se suma una nueva herramienta para observar los macizos más activos. Esto, ya que un grupo de investigadores de Ckelar Volcanes, la Red de Vigilancia Volcánica de Sernageomin, y el Observatorio Volcanológico de Los Andes del Sur (OVDAS), instalaron un nuevo sistema de monitoreo electromagnético para volcanes activos y peligrosos en Chile, como el Villarrica y Llaima, en la región de La Araucanía.
El geofísico y académico de la Universidad de Chile, Daniel Díaz, explicó en Sin Gravedad que, a través de este trabajo, se están probando métodos de observación experimentales. Uno de ellos es la observación de señales electromagnéticas, que mide la conductividad eléctrica del suelo, a fin de observar tempranamente cambios en la estructura volcánica.
Según Díaz, los sistemas de medición experimentales deberían trasladarse a otras regiones, como al volcán Láscar, en la Región de Antofagasta, explicando que un contexto geográfico diferente ayudaría a perfeccionar este modelo de monitoreo. «El volcanismo que se genera en el norte de Chile tiene características bien diferentes al que pasa en el sur», argumenta.
Escucha la entrevista completa de Daniel Díaz en Sin Gravedad con Jorge Lira.